Kaotiko, moda joven y sostenible

Ángel Palacios y Katia Vilagines, matrimonio compuesto por un cordobés y una francesa afincados en Barcelona,  abrieron la primera tienda Kaotiko en 1999, el centro de la ciudad condal. Consistía en apenas 30 metros cuadrados y vendían un tipo de producto que los clientes les pedían  porque no lo ofrecían ninguna de las grandes marcas.   Esto motivó a Ángel  y  Katia en la creación de su propia línea de ropa, adaptada a la demanda de sus  clientes

El nombre  de Kaotiko  se debe a la teoría de que los nombres más sonoros permanecen en la memoria durante más tiempo. Han pasado ya más de veinte años desde que la tienda  de moda joven y sostenible abriera sus puertas al público, pero continúa conservando la misma filosofía. Ésta consiste en “acercar la moda a la calle, creando una comunidad que comparte mucho más que un estilo de vida».

Son palabras de su CEO, y también señala su apuesta por la producción local con el sello “made in BCN”, así como el consumo responsable. Esta filosofía de la marca es un auténtico cebo para ‘millennials’ de entre 18 y 25 años, que valoran especialmente el respeto por el medioambiente.

El valor artesanal añadido de  Kaotiko

Germán Bernad, actual director ejecutivo de la compañía, recalca el valor artesano de todos sus productos. En Kaotico saben que los clientes más jóvenes buscan ropa diferente y elaborada, evitando encontrar con facilidad réplicas de la misma prenda. Bernad espera que la empresa facture 2 millones de euros en 2021 solo a través de Zalando, con quien pactó un acuerdo hace poco más de un año, logrando cerrar el ejercicio contable de este año  con  10 millones de euros

Fuerte apuesta por el ‘e-commerce’

Desde hace un año, el ‘e-commerce’ de Kaotiko ha crecido un 150%, compensando el descenso de las ventas de sus tiendas físicas, como consecuencia de la pandemia. 

Aún así, Kaotiko se reafirmó durante la situación de pandemia en que es preferible comprar dos prendas sostenibles antes que cuatro prendas que sean iguales. La compañía, con más de 80 trabajadores en plantilla y otros 130 empleados indirectos, ha trasladado su sede a Poble Nou,  Barcelona, conservando su centro de producción en Mataró. Allí continuará  confeccionando sudaderas y camisetas, prendas que representan el 90% del total de su producción. El resto procede de tres proveedores nacionales de Igualada, Granada, y de Elche.

A destacar también la línea ‘Genderless’ lanzada por Kaotiko desde hace año y medio, con con tallas desde la XS hasta la XL. Su CEO señala: «Hacemos fotos con modelos hombre y mujer, para que cada uno se ponga lo que quiera, cuando quiera y como quiera. Esta colección funciona muy bien. Ahora mismo ya es un 20% de la producción».

Soñadora e idealista pero con los pies en el suelo y con una visión muy clara de la realidad. Quizás sea toda una paradoja en sí misma que traduce en una insana curiosidad por todo lo que la rodea.